La patología como campo abarca una gran variedad de especialidades, pero sus dos divisiones principales son la patología anatómica y la patología clínica. Aunque ambas pueden trabajar conjuntamente para ayudar a los profesionales médicos a determinar diagnósticos (y tratamientos) específicos, cada una de ellas es distinta. Algunos de los siguientes términos pueden resultar familiares a los lectores de nuestro blog sobre las diferencias entre los laboratorios de patología y los laboratorios clínicos. Los patólogos suelen ser expertos en ambas divisiones, pero en aras de la simplicidad, este artículo se centrará principalmente en la patología anatómica.
La patología anatómica es la división de la patología que estudia los efectos de las enfermedades en el organismo, tanto en su conjunto como a nivel microscópico. Sus objetivos son detectar anomalías, determinar si estas son malignas o benignas y asignar el tratamiento adecuado. En la mayoría de los hospitales, los tejidos extraídos durante una intervención quirúrgica se envían para que los examine un patólogo.
La anatomía patológica es más conocida por su utilidad para identificar cánceres, pero también detecta muchos trastornos, infecciones y enfermedades.
Algunas de las especialidades de anatomía patológica que ofrece HRP Labs son:
- Gastropatología
- Hematopatología
- Dermatopatología
- Neuropatología
- Inmunopatología
- Detección del cáncer de mama
- Patología Genética Molecular
La lista anterior no es exhaustiva, ya que la anatomía patológica abarca muchas otras especialidades que también pueden englobarse en distintas subdivisiones.
La histopatología consiste en examinar tejidos procedentes de una biopsia o de una intervención quirúrgica bajo un microscopio. El proceso de examen utiliza técnicas especiales de tinción y otras pruebas que ayudan a analizar los componentes del tejido.
La citopatología, también denominada citología, consiste en examinar células individuales o pequeños grupos de células obtenidas por raspado o aspiración bajo el microscopio. Estas células pueden obtenerse tanto de líquidos como de tejidos sólidos, que es donde coinciden la patología anatómica y la patología clínica. La patología clínica abarca lo que se conoce como “medicina de laboratorio”, e incluye la mayoría de los análisis de sangre rutinarios, como recuentos de células sanguíneas, estudios de coagulación, determinaciones del nivel de glucosa en sangre y otras pruebas como análisis de orina. Las pruebas de patología clínica se centran principalmente en determinar la composición química de la muestra y la presencia o ausencia de microorganismos.
La patología forense también se considera una división de la patología anatómica y se especializa en determinar la causa de la muerte de un individuo con fines legales. La gente asocia con frecuencia (y de manera errónea) toda la patología con esta subdivisión debido a su rol en los dramas policíacos de la televisión.
Los patólogos siempre están aprendiendo y contribuyendo al progreso del campo de la medicina. Tienen un amplio conocimiento de enfermedades y la fisiopatología que les permite incorporar información de las numerosas subespecialidades mencionadas para ofrecer los diagnósticos más completos posibles.
En HRP Labs trabajamos cada prueba con precisión y excelencia, para asegurar un diagnóstico certero. Para citas e información, llame al (787) 723-2333. Correo electrónico: servicioalcliente2@hrplabs.com.